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SPRING / SUMMER 2017

Muchos de mis pensamientos arrancan desde el caótico lugar donde se cobija la duda y suelen acabar en lugares silenciosos y reservados, a veces, las menos, algunos de ellos fructifican hacia caminos donde la obsesión va creciendo desde la idea desordenada hacia otra cuya forma va evolucionando y se convierte en excusa para contar una historia, es en esos momentos, cuando mi trabajo me permite esa libertad de creación, en los que me siento muy afortunada. De cualquier forma ese camino casi siempre está marcado por senderos serpenteantes, tortuosos y resbaladizos, pero a medida que se avanza a través de ellos se termina confluyendo en ideas mas amplias, generosas y acogedoras, aunque curiosamente igualmente reservadas y silenciosas.

“The Thinker” parte de ese caos inicial del pensamiento, hacia la necesidad de un orden. Arranca desde un pachwork de ideas y acaba en la melancolía del desenlace de un orden final, esa melancolía que surge siempre cuando el proceso de algo placentero acaba por concluir.

Pero “The Thinker” también es una dedicatoria a todos aquellas personas que huyen de lo acomodado, a las que admiro y tomo como referencia personal para seguir avanzando por senderos menos confortables, aquellos como Basquiat o Jeff Wall, que a través de lo aparentemente ilógico, e incluso con un punto de locura, se ven marcados por la necesidad de ir tras la búsqueda de lo diferente, de una forma de pensar autónoma e independiente de convencionalismos, esas personas que buscan otras verdades más allá de las versiones oficiales, que buscan cobijo a través de la euforia que se crea al tener un pensamiento libre y alejado de falsos artificios, aquellos que buscan refugio a través de la melancolía de la individualidad y que toman de ahí la fuerza para crecer y desarrollar obras excepcionales que nos hacen vivir sentimientos únicos y extraordinarios.



• SILUETAS •

En “The Thinker”, la colección está muy alejada de la búsqueda de la belleza perfecta, me refiero a la clásica y pulida belleza fácilmente entendible, estereotipada y decorativa, he intentado trabajar sobre la búsqueda de una particular armonía de lo imperfecto, e incluso defectuoso o anómalo, una búsqueda de la perfección que cae en la cuenta de que solo se puede avanzar hacia ella a través de lo imperfecto.

La colección se desarrolla a lo largo de tres registros que se van mezclando entre si a medida que evolucionan de forma tranquila, pero muy pasional, tanto en la manera de trabajar los materiales como en la introducción de los tejidos y colores.

Al comienzo hay un elaborado trabajo de tejidos rotos y rasgados, poniendo por ello un especial énfasis en la destrucción del material para ser reparado posteriormente en favor de una nueva recomposición, esto se aprecia a través de la elaboración de un nuevo tejido de camuflaje con lenguaje propio, mediante el rasgado, desflecado y posterior zurzido. Todo esto representa un pensamiento que es confuso, perdido, cargado de retazos de ideas inconexas, sin un sentido lógico, pero con identidad suficiente como para que merezca ser ordenado y reconstruido en un nuevo diálogo.

De este primer caos y reconstrucción de los materiales se evoluciona hacia un movimiento en cascada, aquí los volantes se desarrollan desde todos los puntos de vista, sin un patrón lógico de pensamiento, sino que surgen como un rizoma, creciendo desde cualquier línea del corte del patrón de cada prenda. Esto quizá sea una metáfora involuntaria de mi pasión por la cultura juvenil, me gusta que ésta contracultura siempre continúe ejerciendo una resistencia contra cualquier modelo de eje jerárquico que permita una estructura social lógica, son un poco outsiders, con su propia capacidad de pensar y vivir el presente, creando una "belleza outsider" fuera de límites preconcebidos.

Tejidos con motivos florales protagonizan esta parte de la colección, principalmente con un encaje rústico realizado en algodón y una ligera voile de algodón teñida en tye-dye que tiene un posterior print metalizado de flores en su fondo, que no en su forma, jugando con las leyes de la Gestalt y su concepto de la "figura-fondo”.

Este caótico proceso del pensamiento necesita finalmente ser ordenado, pero este se ordena a través de una trastornada belleza en rojos y azules. Tejidos rasgados que descubren recónditos escondites donde aparece el brillo de la pailette, flores bordadas que emergen en 3D de manera caprichosa, o sedas cargadas de perlas bordadas de forma casi anárquica componen principalmente esta última parte. Otra forma diferente de entender la riqueza de los tejidos y lo suntuoso de las prendas, otra forma de entender el pret a porter.



• COLORES •

Verde militar, oliva, tierra, hueso, ceniza, sangre, lapislázuli, cereza, purple rain.